Perdón

He decidido de lado la causa y el efecto
y sumergirme en un cráter sobre mi cabeza
donde la materia prima es nada.
Mirando a ese hombre tomar su vaso
de whisky con hielo, pidiendo a gritos
desde su adentro una calle para correr
tomados de las manos,
pero siempre la nada es irresistible
ese sabor agrio como la sangre de las
cucarachas.
He decidido no pensar, anular la vida,
estupidecer la razón humana y caer
en la nada, porque
la
nada
es hermoso.
Ya no hay golpes en la cabeza.
Ya no está ese amargo fluido amargo
que desactiva mi cerebro, ni la fina arena
es un problema, perforando las piernas
y volviéndose parte de cada uno.
Perdón, pero he decidido anular lo que queda
de este cuerpo, borrar esas imágenes en grises que
rodean el estomago.
Disculpen, pero lo he decidido así.
Mi madre es del cielo, mi padre de la tierra y
yo me mantengo enganchado al universo.
Telón negro al corazón.
He decidido anular la vida.